sábado, 1 de noviembre de 2014

Ataques indiscriminados en contra de nuestro río

Realmente causa  angustia y preocupación ver como nuestras propias autoridades  abusando  de los poderes que el pueblo le confiere obran en contra del cauce del rio de nuestra ciudad  o permiten obrar  en depredación de una fuente natural  que realmente deben respetar y cuidar con dedicación, cosa que no hacen.

Es lamentable  el mal ejemplo de nuestros  gobernantes  que inconcebiblemente  terminan arrebatando el derecho constitucional de los ciudadanos sin importarles en gran medida el bien común ni cuidar con dedicación nuestro medio ambiente.

Cuidar el río no es solamente hacerle parques en algunos sectores, es algo más profundo, es trabajar con “objetivos permanentes” para que su cuenca y su curso de agua estén preservados.  El río debe ser respetado, no se puede obrar con tanta  imprudencia y falta de sentido común  como burlándose de la ciudadanía, extrayendo  toneladas de arenas  sobre un lugar que es una playa, que la sociedad usa constantemente en las temporadas de verano y que debe estar siempre cuidada y protegida.

 La degradación de nuestro río se observa a simple vista dado que antes teníamos un lecho cubierto de arena en todos los sectores, en cambio   hoy  se encuentra barro  por la extracción indiscriminada de áridos. La sociedad entiende claramente  que nuestro curso de agua permite extracción de arena, lo que no permite: es la extracción indiscriminada  como se viene realizando en la actualidad.  Algo no anda bien, algo esta funcionado mal, además existen sobre el tema  declaraciones de funcionarios que no se muestran en absoluto a la altura de las circunstancias e irritan a la ciudadanía, pero parecen que no se percatan de esta situación.
La limpieza del río en muchos de  los sectores es calamitosa y deplorable,  lo que se puede apreciar claramente recorriendo sus costas o también lo que mostró la televisión local cantidades de elementos extraños, basurales en muchos casos con animales muertos que no se han removido. Por otro lado y sobre este tema se observa la riña política entre ciudad y provincia la cual  es lamentable y degradante, demostrando una falta de grandeza de nuestros dirigentes que no se dedican en resolver el problema sino en querer justificar su accionar, que en muchos casos es injustificable.  Si bien hay funcionarios que manifiestan que al rio se lo limpió, es necesario que entiendan que lo que hicieron no alcanza, o está mal hecho,  porque lo que  se observa en sus cauces es preocupante, muy preocupante.

También nuestro gobierno municipal tendría que tomar medidas urgentes para no permitir el arrojar basuras al río y sancionar contundentemente a quienes lo hacen,  pero esto parece que nadie lo controla y entonces los resultados están a la vista. Con el tema del río la ciudad de Río Cuarto demuestra  estar castigada, pero  a este extraordinario recurso natural de vida  que debemos cuidar entre todos lo estamos destruyendo a pasos agigantados sin importarnos lo valioso que sería  contar con un curso de agua limpia para nosotros y para las generaciones venideras y así es que no se entiende por qué tanta irresponsabilidad. Es inaudito e inaceptable  que ocurra esta lamentable situación.

La Comisión Amigos de Río Cuarto junto con otras instituciones de la ciudad  vienen trabajando desde hace más de tres meses  sobre este tema, pidió ante el Concejo Deliberante  la Banca del Ciudadano;  pidiendo que el tema del río sea declarado un objetivo permanente del estado municipal, todo esto   con el propósito de contribuir en lograr que se tome conciencia para preservar esta valiosa fuente hídrica que debemos cuidar entre todos. Así fue que se inició una campaña de juntas de firmas en donde se reunieron más de siete mil;  trabajando  en este programa se observa la gran preocupación de la gente de la ciudad y la región quienes manifiestan  constantemente el reclamo por  la extracción indiscriminada de áridos  sobre el curso del río, lo ven como un grabe y descontrolado problema, encontrándose muchas personas indignadas por las actitudes invasoras de quienes manejan esa extracción, la cual se convierte en una provocación a la buena fe de la ciudad, pero  parece que las autoridades provinciales a este problema que reclama la gente, no lo conocen o no lo  quieren ver.  Así podemos llegar a la conclusión  que este es un tema que no les preocupa a nuestras autoridades, al contrario, extraer arena de este modo es el “método aprobado” sin importarle en absoluto lo que piense el ciudadano. Entonces es así que nos debemos preguntar  ¿No es esto un atropello?  Y si lo es ¿Por qué?

Por estos días todos los riocuartense debemos llamarnos a la conciencia y exigirle a nuestros gobernantes  un adecuado respeto sobre este delicado tema; no debemos ser víctimas de ningún  atropello sobre el manejo de nuestros recursos naturales. Son muchas las instituciones públicas y privadas que deben unirse y luchar por este respeto a la vida de nuestro curso de agua y saber que esta fuente natural no puede ser manoseada de esta manera  porque es atentar en contra del futuro.  Río cuarto debe trabajar  para lograr este objetivo como debe trabajar con gran esfuerzo para lograr una planta de tratamiento para sus efluentes cloacales y no seguir arrojando al río sus desechos sin tratamiento.

Todo debe ser una lucha basada en el respeto y en objetivos claros. Los gobernantes se deben poner de acuerdo y trabajar para el bien común. No puede ser el río un tema político, debe ser un objetivo riocuartense  que una a todos los ciudadano y a las instituciones sin distinción de banderías,  ¿seremos capaces de demostrar esta grandeza? Es un gran desafío que los tiempos actuales nos exigen que asumamos, todos podemos hacer algo,  ayudemos entre todos a construirlo,  no degrademos mas nuestro valioso curso de agua; no saquemos más arenas de manera indiscriminada de nuestro lecho del río porque como lo están haciendo aparenta ser una  depredación.


Walter Bonetto
1 de noviembre de 2014
http://walterbonettoescritor.blogspot.com
Twiter: @walterbonetto

Página de Facebook de Walter Bonetto
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario