Viviana Yawny
Abogada
Rosarina, pasó gran parte de su niñez en Misiones donde su madre es maestra de frontera, ahora ciudadana de Río Cuarto y Concejal; militó desde muy joven en el partido socialista, conoció y trabajó junto a importantes líderes de este partido en la ciudad de Rosario. Trabaja ahora cada día con nosotros y tiene un visión muy clara de lo que nos pasa como ciudad y como sociedad, una persona muy cálida, que trasmite conocimientos y optimismo, denota profunda sinceridad en sus conceptos y habla con el corazón abierto…
“La pobreza existe en gran medida por la mala distribución de la riqueza. Debería darnos vergüenza vivir en un país que produce tantos alimentos y que no pueda abastecer y darle una calidad nutricional a toda la población…”
Buenos días, Viviana, gracias por concederme esta entrevista, te pedí la misma en virtud de que sos una importante protagonista de la ciudad; una referente política muy destacada, por lo que será muy interesante publicar lo que expreses, porque en cierto modo toda la experiencia que indudablemente tienes adquirida son una lección de vida para muchas personas, especialmente para muchas mujeres que luchan constantemente para su superación. Será un gusto para mí este dialogo.
— El placer es mío, Walter, más si se trata de una charla con un amigo, es un honor compartir estas pequeñas referencias de lo que uno hace en la vida.
Viviana sabemos que sos concejal, ¿Por qué partido concretamente?
— Por el partido socialista.
Te hago esta entrevista en este lugar tan histórico de Río Cuarto que es la cuna del socialismo de la ciudad, la Biblioteca Segat.
— Así es, en esta casa que tiene tanta mística, cruje llena de recuerdos que nos da fuerza de luchar por un mundo mejor.
Evaristo Segat fue un referente destacado de Río Cuarto que muere muy joven lamentablemente. Fue un hombre con una trascendencia y una espontaneidad por la lucha política y sindical.
— Así es, fue un gremialista que luchaba por los derechos de los trabajadores. Fue uno de los fundadores de esta biblioteca porque estaba convencido que la educación era una de las principales herramientas para que aquellos mas vulnerados pudieran ejercer el derecho de los mismos y salir adelante construyendo una sociedad mejor.
Viviana, ¿Cómo y donde fue tu niñez?
— Yo nací en Rosario por una cuestión eventual, mis padres vivían ahí, mi papá en ese momento estaba estudiando, en plena época de la dictadura. Ellos son de Misiones, así que a los 4 años me trasladan, estuve en Apóstoles, después en Posadas y a los 17 años vuelvo a Rosario, la sangre de esa tierra me llamaba. Fui a estudiar abogacía, me recibí allí y me vine a Río Cuarto porque me enamore de una persona que es de Sampacho y vive en Río Cuarto. Una especie de vida nómade en aquellos años. Hoy mi familia está en Misiones.
¿Cómo fue tu vida en Rosario?
— A los 17 años encaré esa aventura de ir a estudiar, vivir sola. Siempre fui independiente y pude experimentar esa vivencia, siempre conté con gente, amigos que me acompañaron, que militaban para el movimiento socialista y fueron ellos quienes me comenzaron a mostrar lo que es el trabajo social a través de una militancia partidaria. Allí conozco a Guillermo Estévez Boero, a Hermes Binner y esto fue un puntapié de una carrera que se transformó en uno de los ejes que guían mi vida, trabajar desde la política para la gente.
¿Trabajaste con Hermes Binner mucho tiempo?
— Claro, con Hermes estuve en la primer campaña para candidato a intendente en la ciudad de Rosario y a partir de ahí trabajando muchísimo desde la militancia universitaria, fui consejera directiva en varias oportunidades.
¿Tu familia actual sigue en Misiones?
— Así es, mi mamá es maestra, está haciendo los trámites de jubilación, ella fue maestra de frontera muy jovencita, hoy tiene 67 años y sigue trabajando como vicedirectora, su vida es la escuela, la enseñanza y trabajar con los sectores mas vulnerados, yo la acompañe desde muy chiquita y creo que ese fue el comienzo de todo.
Indudablemente que en tu caso se nota y trasmitís una vivencia muy importante, justamente como sos una profesional, una persona con buena experiencia política y que trabajas por los más vulnerables: ¿Cuál es tu opinión acerca de la pobreza en Argentina?
— La pobreza existe en gran medida por la mala distribución de la riqueza. Debería darnos vergüenza vivir en un país que produce tantos alimentos y que no pueda abastecer y darle una calidad nutricional a toda la población. Yo creo que la pobreza estructural es una cuestión que tiene que ver con las prioridades del gobierno que administra justamente un estado, que tiene que ser quien cuide a los más vulnerables, que proteja a los que menos tienen y que distribuya de manera más equitativa. En gran medida la pobreza pasa por una cuestión de decisión política. Nosotros estamos combatiendo esta política que por un lado tiene que ver con el clientelismo y por el otro lado con lo terriblemente malo que es el otorgamiento de subsidios a empresas o a aquellos que en realidad son los amigos del poder y que debería ponerse el eje en otro tipo de política como tiene que ver con el hecho de la generación de empleo. Hace poco hubo elecciones en Chaco una de las provincias más pobres de Argentina, con el mayor índice de desnutrición junto a Formosa, y vuelve a ganar quien lleva a esta política de pobreza, esto también habla de una situación cultural en la que estamos, una situación de involucramiento por parte de aquellos otros sectores que estamos viendo. Yo creo que la suma de todos va a tener que servir en algún momento para cambiar estas realidades, porque no puede haber más niños en Chaco que se mueren de hambre al lado de políticos que se enriquecen a costa de esto, es una vergüenza moral.
Qué visión tenés con toda tu experiencia, ¿seremos capaces los argentinos en algún momento de superar esta etapa de delincuencia y de falta de honestidad en el ámbito político?
—Hay políticos deshonestos en la medida en que la gente deje que los haya, hay corruptos en la medida en que la corrupción siga estando en todos los ámbitos. Cuando nosotros incorporemos que la honestidad no es un valor que tiene que tener el político, naturalmente debe ser honesto y tus cualidades deben pasar por otro tipo de aptitudes, la honestidad va de la mano con la ética y lo moral. Por eso el trabajo cuando uno encara la política, tiene que apuntar fundamentalmente en incorporar estos valores de la ética, la moral, la honestidad, como algo natural que tiene que ser parte de la persona, y no demostrándolo solamente.
Hoy a través de muchísima información podemos saber cómo se ha conducido una persona a lo largo de su vida. Una persona corrupta no lo es solo un año y al otro año deja de serlo, una persona o es honesta desde la base y se comporta de esa manera, o si una persona cae en una situación deshonesta, entiendo yo al menos, que hay que condenarlo socialmente, y esta condena de un ciudadano esta en el voto.
Lamentablemente hay que cambiar el pensamiento de la gente que dice “para que vamos a votar si son todos los políticos iguales”, de esta manera le estamos dando una vía libre al político que dice “Bueno si total la gente me perdona”.
Vivimos en un sistema que hoy ha permitido que este poder pueda hacer todo, total todo vale, a costa del propio beneficio, hace que perdamos de vista la solidaridad y el hecho de que tenemos que entender que vivimos en una sociedad que tenemos que convivir buscando el bienestar común, colectivo sobre el interés común.
Te quiero preguntar Viviana, ¿Qué es Río Cuarto políticamente? Es una ciudad que la vemos con muchas inquietudes, pero también con muchas interferencias, con bastantes contradicciones ¿cómo ves vos a la ciudad?
— A veces permitiéndome ver a Río Cuarto desde afuera, (no desde el Concejo Deliberante) uno viene de otro lugar, con otras miradas, con otras vivencias y en particular yo veo a Río Cuarto con gente que no es conformista, es la primer ventaja que podemos tener para ser una ciudad mucho mejor, desarrollarnos más. Segundo, deberíamos tener un gobierno que acompañe a los vecinos, a esas inquietudes y que busque permanentemente el bienestar colectivo, hay una ciudad que tiene un potencial que hoy a lo mejor no está aprovechado en su máxima expresión, que tiene que ver con los espacios verdes, con los lugares de esparcimiento, con un río que atraviesa a la ciudad, no miramos como debiéramos y no lo consideramos como un patrimonio principal de nuestra ciudad, hoy tenemos una ciudad que incluso está en una ruta que es turística, y fundamentalmente tiene que ser una ciudad que se pueda convivir con los pro y los contra y ahí creo que tenemos que poner un poco más el acento, siendo un poco más tolerante con algunas situaciones que hacen a una convivencia urbana, pero tampoco caer en la mediocridad.
Hoy Río Cuarto, para mí, es un diamante en bruto porque no ha llegado a todo lo que podría ser como una ciudad mediana, porque culturalmente tiene una riqueza una vida a través de quienes se expresan por medio del arte, la cultura, la escritura.
¿Tienen claro todos los concejales, todo el poder legislativo de Río Cuarto estos conceptos de los que vos me estás hablando?
— Yo hablo desde mi lugar. Puede que haya mucho en lo que tengamos la misma mirada, a veces se trata de construir, de proponer o de buscar consensos, pero también interfieren en muchos casos el hecho de que a lo mejor una mirada viene del oficialismo y la oposición la critique por eso, y viceversa. No nos despojamos de esos egoísmos, falta un poco de grandeza.
Viviana, es tan interesante hablar con vos, sos tan clara para expresar tus ideas. Vamos a tocar unos temas que me interesan en esta entrevista para registrarlo como corresponde, dame tu posición sobre tema de la droga, que asusta, estremece. ¿Cuál es tu pensamiento al respecto?
— Hoy está clarísimo que la droga es un flagelo que inclusive ataca a todos, no distingue clases sociales. Desde mi concepción ideológica y mi posición personal, yo estoy a favor de que se despenalice la droga, no significa liberarla, sino poner el acento en la persecución y represión a los que comercializan, los que proveen, y a los que se enriquecen a costa de la vida de los demás. Poner tras la reja a un pibe que se fumó un cigarrillo de marihuana y dejar suelto a quien se enriquece es algo que tenemos que cambiar en las políticas que tienen que ver con el combate de la droga. El tema que a mí me preocupa es que la droga hoy se fabrica, y se comercializa en Argentina, pero además tiene un cómplice que es terriblemente preocupante que es la política. Hoy la droga financia campañas políticas, hoy la droga tiene el paraguas de los grandes políticos, de los grandes encubridores que hace que se libere en fronteras, se liberen permisos y hace que el combate real sea cubierto, se sabe dónde está la droga, los grandes traficantes. Ahí hay que atacar. El desarme de la droga implica el involucramiento de mucha gente e implica la decisión política, si no hay decisión política para terminar con la droga no se va terminar nunca. Lamentablemente hoy, en la provincia de Buenos Aires por ejemplo, hay una mafia instalada que impide que el gobierno actual y los gobiernos que vengan puedan avanzar en este tema.
¿Crees que tenemos esperanza para salir de esto?
— Partamos de la base de que uno está en la política porque busca el cambio, dentro de ese cambio es para estar mejor y combatir los flagelos de la sociedad, estos flagelos enferman a la sociedad. Debemos buscar los remedios para combatirlos. En otros países se ha podido, para ello debemos contar con gente que debe asumir el costo de tomar ciertas decisiones. No es imposible el cambio.
Te voy a hacer la última pregunta, uno de los mayores tesoros que tiene el ser humano en su vida, para mi es la juventud y uno de los mayores tesoros que tiene una sociedad, es la juventud. ¿Cuál es tu punto de vista acerca de la juventud actual?
— Hoy los jóvenes están teniendo una participación social, política y se ve en organizaciones como techo, caritas, lugares donde buscan la participación, también en la política. Los jóvenes están pidiendo su lugar. Yo no soy de las que piensan que los jóvenes se desentienden, que están en otra, quizá haya algunos, o muchos. Yo miro a aquellos jóvenes que buscan ser protagonistas, sin esperar a la adultez, trabajar en cambios para ellos, para estar mejor. Veo a los jóvenes con un enorme sentido de compromiso, con grandes valores y es ahí donde tenemos que poner el acento apuntando a que no se pierdan estas cosas, estas utopías, estos sueños de buscar un mundo mejor, no hay que pincharles el globo, hay que inflarles los sueños, generarles ilusiones. Hay que tener pasión para todos los ámbitos en la vida, eso es contagioso y quizá lo que pueda llegar a salvarnos.
Me resultó muy importante, muy aleccionadora la entrevista con la concejal Viviana Yawny, realmente le quiero agradecer por el tiempo que nos has dado, sos una persona con mucho conocimiento y optimismo. Y saliendo de contexto te deseo hacer la última pregunta:
¿Te gusta cocinar?
— Me hiciste una pregunta justa, porque este fin de semana me la pase cocinando, agasajando a amigos, familiares. Me tiene que agarrar con ganas.
¿Cuál es tu plato preferido?
— Las pastas, las verduras.
¿Sos una persona feliz?
— Todos los días uno encuentra motivos para ser feliz, tampoco es que uno vive en una vida de color de rosas, uno tiene problemas, pero busca ser feliz con las cosas simples de la vida, una mascota, un amigo, una pareja, hijos, nietos.
Días pasado estuviste dando una exposición en el Congreso de la Nación con el tema de la protección de los animales
— Fue un lindo reconocimiento, me invitaron desde la Cámara de Diputados, un poco valorando y reconociendo la tarea que vengo realizando hace muchos años con respecto a la protección hacia los animales.
¿Tenés apoyo en la ciudad con respecto a este tema?
— Es impresionante, me alegra mucho saber que Río Cuarto es una ciudad que ama a los animales y que reprocha cada tipo de maltrato. Lo que sucede es que hay que seguir trabajando, ya que todavía hay personas que generan algunos actos que hay que condenar desde la ley y socialmente también.
Abogada y Concejal Viviana Yawny, fue un placer haberla entrevistado, MUCHAS GRACIAS.
— Muchas gracias a vos, Walter.
Octubre de 2015
